El Ministerio de Seguridad Pública de China y un centro de investigación
en el país asiático preparan una investigación dirigida a IBM, Oracle y
EMC por cuestiones relacionadas con seguridad, informó Shanghai
Securities News.
El objetivo es confirmar algunas revelaciones realizadas por el ex contratista estadounidense Edward Snowden acerca de la vigilancia generalizada de la NSA y del programa PRISM. El conflicto se relaciona con una sospecha de hackeo por parte de la agencia a la infraestructura de red crítica en universidades en China y Hong Kong.
Los documentos filtrados por Snowden evidencian que la NSA ha tenido acceso a grandes cantidades de datos de internet como correos electrónicos, chats y videos de las grandes empresas tecnológicas como Facebook y Google en virtud de un programa gubernamental de espionaje de EU conocido como PRISM.
“En la actualidad, gracias a su superioridad tecnológica, muchos de nuestros sistemas informáticos centrales son dominados por empresas extranjeras de hardware y software, pero el escándalo de PRISM implica nuevos problemas de seguridad”, dijo una fuente anónima al diario chino.
El Ministerio de Seguridad Pública se negó a realizar comentarios y el Centro de Investigación de Desarrollo del Consejo de Estado, uno de los grupos presuntamente involucrados, dijo a Reuters que no estaban llevando a cabo una investigación.
Un portavoz del Ministerio de Industria y Tecnología de la Información (MIIT), que supervisa la industria de IT de China, dijo que no podía confirmar nada debido a lo delicado del asunto.
IBM, por su parte, aseguró en un comunicado enviado por correo electrónico a Reuters que la compañía no podía hacer comentarios. Oracle y EMC no estaban disponibles para hacer comentarios.
China, acusado en repetidas ocasiones por Estados Unidos de realizar fuertes ciberataques, aprovechó las filtraciones hechas por Snowden para señalar a Washington por su hipocresía.
Reguladores chinos y la policía, aseguran, han iniciado una serie de investigaciones en las últimas semanas para descubrir la forma en que las empresas nacionales y extranjeras hacen sus negocios con EU.
"El caso PRISM ofrece sin duda bastante material como para generar preocupación", indicó el director general de la firma Marbridge Consulting en Beijing, Mark Natkin, quien añadió que lo que ha hecho el escándalo es hacer cada vez más difícil determinar qué tipo de prácticas tecnológicas son legítimas al tratar de resolver temas políticos.
Fuente: bSecure
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